ADIOS ESTAMBUL....HOLA JORDANIA!!!

El domingo como era nuestro último día, por fin ¡¡madrugamos!!

Nos metimos por unas calles e investigamos un nuevo camino para llegar a Kabatas. Encontramos el barrio más humilde de Estambul o por lo menos, el más humilde de los que nosotras habíamos visto. Nos pareció muy curioso que todo el mundo dejaba colgadas cestas con cuerdas por las ventanas a modo de ascensor para subir la compra. Pensamos en subirnos pero nos díó palo…

No sabíamos muy bien el camino y preguntamos a unos polis que estaban en la garita. Nada más preguntarles uno de ellos sacó el móvil y se puso a hacernos fotos y lo de tooooodo el rato, Mari Pili y Mari Carmen que guapas sois, que ojos más bonitos tenéis, sois de Cataluña?? Barça?? Messi?? Toreros, Franco, independencia de Cataluña…

Llegamos a Kabatas y nos cogimos un ferry a Usküdar para ver La Torre Leandro. Esta torre tiene dos leyendas.

Una de ellas es que al emperador Komnenos le dijeron que su hija moriría de una picadura de serpiente así que decidió encerrarla en la torre ya que está completamente rodeada de agua. Un día le llevaron a ella de regalo una cesta llenas de manzanas. Al aceptarla vio que en su interior había escondida una serpiente por lo que la picó y murió a causa de su mordedura.

                  

Y la otra, cuenta que Leandro se enamoró de Hero, la sacerdotisa de Afrodita. Estaban separados por el estrecho por lo que él cruzaba todas la noches a nado guiado por la luz de la torre. Una noche de tormenta el faro se apagó y murió. Al enterarse ella, se tiró al agua y se ahogó.

De aquí nos fuimos caminado con un solete genial hasta Harem para cogernos otro ferry dirección Sultanamet ya que nos habíamos dejado un par de cosillas por ver (cierran todos los museos a las 18:00h).

Vimos el Hipódromo. Era el centro de diversión con carreras de carros y circos romanos.

Se encuentran el Obelisco Egipcio. Es el monumento más antiguo dedicado al faraón Tutmoisés II por la victoria de Mesopotamia.

La columna Serpentina, erigida por la victoria de las ciudades Griegas contra Persas.

Y la columna de Constantino, en homenaje a su abuelo Basilius. Se recubrió de cobre y bronce pero en la cruzada lo arrancaron para acuñar monedas.

                             

Nos comimos una mazorca de maíz y una especie de bollo salado típico de aquí.

De camino nos encontramos unas maquetas gigantes de gatos. No sabemos muy bien por qué, pero Estambul está llena de gatos que viven como reyes.

Estuvimos de compritas por la tarde, pulseras, anillos, fulares… en un rastrillo en el que decían “hoy engañamos un poquito menos”

y acabamos en el Bazar de las Especias o eso creíamos nosotras… Era una especie de rastro en el que lo mismo vendían plantas, que pienso, que perdices, que tulipanes, que palomas mensajeras… Y nosotras decíamos que especias más raras¡¡ por fin el Bazar de las Especias de verdad. Otra locura como ayer… pero eso sí, lleno de dulces, colores, olores y españoles!!!

Como estábamos reventadas de caminar, decidimos sentarnos en las escaleras de La Mezquita de Yeni y escuchamos la llamada a la oración. Impresionante el respeto que tienen.

Y como era nuestro último día y nos había salido todo tan bien, decidimos tomarnos la última cerve en el bar de nuestros amigos del “passaport”, Eyif. Nos pusimos a hablar con nuestro amigo Halim, vino su primo Fathi y nos dieron las 02:00h haciendo turismo como locos!! Nos hablaron de su política, de su historia, de sus costumbres… ¡¡y todo esto en ingles chicos¡¡

                                                 

Les contamos lo del blog, les encantó la idea y decidieron hacer publicidad de todos los bares de sus colegas, muy chulos por cierto¡¡ Nos reimos muchísimo, súper  atentos, nos enseñaron palabras en Turco, a jugar  a un juego de mesa al que juega todo el mundo  y con muy buen rollo. Aquí os dejamos un book para que le echéis un vistazo.

Si algún día vais a Estambul, ya sabéis donde ir.

De vuelta en casa!!! Nos bajamos una peli, un rato de charleta y echamos cuentas de a que hora nos tenemos que levantar. 15 minutos para ducharnos otros 15 para la maleta, 5 para ultimar… total media hora antes!!

Esta mañana ha sido una locuraaaaaaaa!!!! La media hora se ha convertido en hora y media de pelea a muerte con la maleta. Pati a puñetazos, yo a patadas, luego yo a puñetazos con Pati!!! Y total que hemos perdido el bus después de ir con 5675kg en la espalda corriendo por Istikal a las 10:00h de la mañana. Aun así los turcos que nos ofrecían las tarjetas de visita de sus bares que nosotras muy educadamente cogíamos con la boca!!!

Al final hemos llegado fenomenal, hemos encontrado todo perfecto y cuando nos íbamos a montar en el avión destino Jordania, hemos dejado pasar a un chico que nos dice “Vosotras me hicisteis una foto en el Bazar???”

Resulta que se había ido sólo a Estambul de vacaciones y es de Ammán. Nos ha dado su teléfono, su facebook, ha estado todo el vuelo pendiente de si teníamos algún problema, nos ha dicho que le llamemos para cualquier cosa, que nos hace de guía, que nos ayuda en todo lo que necesitemos, así que mañana por la mañana hemos quedado en llamarle para que nos enseñe Jordania!!

Pero en el aeropuerto la hemos vuelto a liar!!! Nada más llegar teníamos que hacernos el visado (tenemos el pasaporte llenito de sellos!!!!!) y pagarlo en Jordanos. Hemos intentado sacar dinero de un cajero pero no funcionaba… el policía nos ha dado permiso para que una se quedara con él y la otra entrara a sacar dinero de otro cajero.

Paty valiente como nadie, saca su tarjeta de Caixanova y comienza su aventura jordana. Primero no la dejan salir y oigo “Elena que no me dejan salir…”, consigue entenderse en jorinlespañol y desaparece.

Desaparece durante 20 minutos de reloj mientras siete policías me observan y hablan entre ellos. Tensión absoluta!! Mientras tanto Paty de cajero en cajero preguntando que “dónde coño había uno que funcionara” (en inglés) ellos la contestaban en Jordano.  Después de recorrerse todo el aeropuerto rodeada de jordanos que le decían cosas me salva de las mil miradas. Los Jordanos son muy vacilones.   

Nada más salir del aeropuerto se nos acercan, sin exagerar, ocho taxistas peleándose por subirnos en el suyo y con una pronunciación casi bilingüe decimos “Khyyam Alwhadat” ellos a lo Carlos Sobera nos levantan las cejas y entendemos que tenemos que enseñarles el papel…  45km hasta casa y 20€, perfecto!!

Ahora estamos en la habitación, que está guay, con baño para nosotras solas, con internet ahora si, ahora no, ahora si… y con un recepcionista muy salao que al decirle que teníamos hambre se ha ido a un bar y nos ha traído la comida a la habitación.

Ahora a prepararnos el planning de la semana!!! Una peli y a dormir. Besazos!!!